Nicolás Facundo Quiroga

Lugar de nacimiento: Quilmes, Buenos Aires, Argentina

Fecha de nacimiento: 19 de Abril de 1985

Fútbol, luego existo

Cada loco con su tema, titulaba una canción el enorme Joan Manuel Serrat. El tema del que aquí escribe, es el fútbol. Recuerdo con mucho cariño el primer Mundial (la mayoría lo escoge por nostalgia), sinceramente pienso que es como la primer novia, esa que nunca se olvida.

Galeano decía que cada 4 años colgaba en su casa un cartel de «cerrado por fútbol». Pues bien, en la mía, el dichoso aviso permanece firme, día sí, día también.

Vivo para el fútbol y mi familia y aquí estoy escribiendo este perfil con esguince de costillas como ese jugador que tiene que multiplicar esfuerzos porque le falta la magia del 10. No tengo la genialidad del habilidoso escritor, pero con mucho sudor se intenta, al menos, una humilde imitación.

«Se puede cambiar de cara, de casa, de familia, de novia, de religión, de Dios pero hay una cosa que no puede cambiar, de pasión!»

Experiencia previa

Mis comienzos como redactor fueron los resúmenes que elaboraba los domingos sobre lo más transcendental en el mundo del balompié. Algunas notas en Facebook y el aprendizaje en Marcaje Individual con equipos a cargo como el Greuther Furth o el Borussia Monchengladbach. También realicé coberturas en directo para el sitio web en distintos segmentos diarios.

El destino quiso que (gracias a Wembley Fútbol en sus inicios), coincidiera en algunos puntos de vista con Diego Federico Huerta, sobre el Atlético Mineiro campeón de América. Desde aquel preciso momento, comenzó mi andadura por Cultura Redonda hasta hoy.

Tras mucho trabajo y gracias a la recomendación de Diego, tengo la gran posibilidad y el gran honor de escribir en el Magazine de Martí Perarnau y de llevar de la mano junto a Nicolás Di Pasqua, esta maravillosa ilusión llamada Wembley.

Wembley Fútbol

Anteriormente lo denominaba: «maravillosa ilusión». Particularmente no busco el reconocimiento individual, el colectivo lo merece todo.

«Cuando jugamos para nosotros, jugamos para el rival. Si jugamos para el equipo, jugaremos para nosotros».

El objetivo principal de nuestro pequeño sueño es transmitir ese tan olvidado amor por la profesión. No dejar nada para el azar. La investigación que dura horas para luego plasmar en una nota, el análisis táctico de un partido u otro tipo de formatos, son la camiseta y el único escudo que besaremos.

 

 

Correo Electrónico: nicoquirogawembley@yahoo.com

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